Por suerte para la humanidad, muchas mujeres escritoras del siglo XX tuvieron voz mediante sus libros. Antes, la mayoría de ellas caían en el olvido, enterradas sin reconocimiento y escondidas tras firmas de anónimo o de su propio marido.
Mientras que escritores de otras épocas nos vienen a la memoria a borbotones, traer a la mente nombres de autoras nos cuesta mucho más. En mi caso, idolatraré siempre a Jane Austen y a las hermanas Brontë por su genialidad, la brillantez de la prosa y la valentía, pero en este post le daré espacio a las escritoras contemporáneas. En concreto, a las denominadas como Las SinSombrero.
Si haces una búsqueda en Google imágenes con la palabra «autora de contemporánea» en el resultado aparecen hombres, y esta tendencia hay que reconducirla. Mi intención es darles el lugar que les corresponde a estas mujeres, quienes con sus novelas me han hecho vivir y sentir historias que jamás olvidaré.
¡Ah! Y un dato importante, antes de que se me olvide: si escribo mujeres escritoras en lugar de mujeres a secas es por una cuestión de SEO.
La historia detrás de Las SinSombrero
El nombre «Las SinSombrero» nace de una anécdota que aconteció en Madrid, allá por los años 20. Las pintoras Margarita Manso y Maruja Mallo paseaban por la Puerta del Sol sin sombrero, un atrevimiento en esa época, ya que según la norma esa prenda era indispensable. La metáfora se entiende al asociar la liberación de la cabeza con la de las ideas.
La propia Maruja Mallo relata el hecho con sus palabras: «Un día se nos ocurrió a Federico, a Dalí, a Margarita Manso y a mí quitarnos el sombrero porque decíamos que parecía que estábamos congestionando las ideas, y atravesando la Puerta del Sol nos apedrearon llamándonos de todo».
Años más tarde, en RTVE se les ocurrió agrupar a las mujeres de la Generación del 27 con este nombre y realizar un documental. Entre ellas se incluyen pintoras, escritoras, escultoras y poetas.
Mujeres escritoras del siglo XX pertenecientes a Las SinSombrero
Como el tema que nos ocupa es la escritura, sin desmerecer al resto ahondaremos en aquellas que usaron la pluma para expresar sus ideas. ¿Adivinas quiénes se encuentran en la lista? Hagamos un repaso por cada una.
María Zambrano
María Zambrano (Málaga, 1904) es una de las filósofas más relevantes de principios de siglo. En sus ensayos reivindicó el rol de la mujer emancipada. Al terminar la guerra civil se exilió y ejerció como maestra en universidades de Latinoamérica (Cuba, México y Puerto Rico). Su contribución como prensadora fue reconocida en los premios Príncipe de Asturias de Comunicación y Humanidades (1981) y Cervantes (1988).
Su producción es muy amplia, aunque cabe mencionar Claros del bosque (1977) y Delirio y destino (1988).

Rosa Chacel
Rosa Chacel (Valladolid, 1898) empezó a relacionarse con el arte mediante la escultura. Viviendo en Madrid frecuentó el café Granja del Henar y el Ateneo, lugar en el que dio su primera conferencia «La mujer y sus posibilidades». En 1921 se casa con Timoteo Pérez Rubio, un pintor, y se mudan a Roma a vivir. Años más tarde, en 1930, publica su primera novela Estación. Ida y vuelta. Cuando terminó la guerra civil se trasladaron a París y posteriormente a Río de Janeiro y Buenos Aires.
Escribió, entre otras, Teresa (1941), Memorias de Leticia Valle (1945) y Barrio de Maravillas (1976).

Josefina de la Torre
Josefina de la Torre (Gran Canaria, 1907) empezó con tan solo 13 años a escribir en las revistas de poesía más conocidas del momento. También escribió novelas, fue cantante lírica y se convirtió en la primera actriz del Teatro Nacional María Guerrero. En 1946 emprendió con su propia compañía teatral. Además, en el 2000 la nombraron Miembro de honor de la Academia Canaria de la Lengua. Falleció dos años después, en Madrid.
Es autora de Poemas de la isla (1930) y Oculta palabra cierta.

Luisa Carnés
Luisa Carnés (Madrid, 1905) fue una joven autodidacta que llegó a periodista y escritora. Nacida en una familia humilde, abandonó la escuela pronto para aportar dinero en su casa. Esto supuso que su rato de escritura se concentrase en las noches. Tras estallar la guerra civil tuvo que poner rumbo a la frontera con Francia, y nunca pudo regresar a su patria.
Se hizo popular con obras como Natacha (1928) y Tea Rooms (Mujeres obreras) (1934).

Concha Méndez
Concha Méndez (Madrid, 1898) fue una mujer polifacética que abordó la narrativa, la poesía, el teatro y los guiones. Editó colecciones en revistas como Poesía, Héroe, 1616 y Caballo Verde. Tras la guerra civil se exilia a París, después cambia a La Habana y a México D.F., ciudad en la que fallece en 1986. En su juventud conoció a Luis Buñuel y mantuvieron una relación de noviazgo durante cinco años.
Sus obras más relevantes son: Inquietudes (1926), Surtidor (1928) y El carbón y la rosa (1935).

Todas estas mujeres escritoras del siglo XX forman parte de la literatura contemporánea española y fueron precursoras de la novela contemporánea.
¿Las conocías?